Un reciente estudio elaborado por la Asociación Americana de la Automoción (AAA) analizó diferentes siniestros con daños y concluyó que la mayor parte de los costes de reparar los sistemas avanzados de asistencia al conductor están asociados al reemplazo y calibración de los sensores.
En este sentido, además de constatar que los sistemas ADAS aumentan el coste de las reparaciones hasta en un 37,6%, la AAA afirma que no completar la puesta a punto de estos sistemas cuando resultan dañados puede ser mortal.
Desde la perspectiva de evitar accidentes de tráfico o reducir los daños a las personas en caso de que tenga lugar un siniestro, la AAA revisó el uso y mantenimiento, entre otros, de los sensores de radar, ultrasonidos y cámaras utilizados en el control de crucero adaptativo, la advertencia de colisión, el frenado automático de emergencia, la advertencia del cambio de carril y el asistente de mantenimiento de carril, la vista envolvente de 360º, el asistente de estacionamiento, la nivelación automática de faros, la iluminación frontal adaptativa o el reconocimiento de señales de tráfico.
Las reparaciones, incluida la alineación de las ruedas, el reemplazo del parabrisas y de los espejos laterales, recoge el informe, podrían requerir de calibraciones costosas para garantizar que los sistemas ADAS involucrados funcionen adecuadamente.