La Dirección General de Tráfico (DGT) ha lanzado una nueva alerta sobre una tendencia preocupante en las carreteras: el aumento del número de conductores que utilizan el móvil mientras conducen. Según los resultados de su última campaña de vigilancia de distracciones, llevada a cabo entre el 7 y el 13 de octubre, el uso del móvil al volante sigue en aumento, con un incremento del 10% respecto al año anterior. Este comportamiento no solo pone en riesgo la vida del propio conductor, sino también la de otros usuarios de la vía.
Una infracción cada vez más común y peligrosa
Durante la campaña, la Guardia Civil controló más de 553.000 vehículos, de los cuales 3.687 conductores fueron denunciados por usar el teléfono móvil mientras conducían, representando un 42,8% de las infracciones totales. Este dato convierte al uso del móvil en la infracción más detectada y denunciada en las carreteras españolas.
Las distracciones al volante, en particular por el uso del móvil, disminuyen la capacidad de reacción del conductor. En situaciones de emergencia, como el cruce de un animal o un vehículo, el tiempo de respuesta se ve considerablemente afectado, lo que aumenta el riesgo de accidentes. El uso del móvil al volante está sancionado con la pérdida de seis puntos del carné de conducir y una multa de 200 euros, pero los riesgos que implica van mucho más allá de la sanción económica.
Otras distracciones en el punto de mira
Además del uso del móvil, otros tipos de distracciones han sido motivo de sanción durante la campaña. 524 conductores fueron denunciados por no usar el cinturón de seguridad y 393 por usar auriculares mientras conducían. La DGT también detectó conductores que leían o buscaban objetos dentro del vehículo, comportamientos que, aunque puedan parecer inofensivos, aumentan significativamente las probabilidades de sufrir un accidente.
Alcohol, drogas y distracciones: una combinación peligrosa
Uno de los datos más alarmantes de la campaña es el número de conductores que, además de distraerse al volante, fueron detenidos por conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas. En total, 785 conductores dieron positivo en alcohol y 973 en drogas. Estas infracciones no solo agravan el riesgo de accidentes, sino que pueden constituir delitos contra la seguridad vial, con penas que van desde la retirada del carné de conducir hasta multas o prisión.
La concienciación como herramienta clave
La campaña de la DGT no solo tiene como objetivo sancionar, sino también concienciar a los conductores sobre los riesgos de las distracciones al volante. Según la DGT, es esencial que los conductores tomen conciencia de la importancia de mantener la atención plena en la carretera para evitar accidentes y situaciones de riesgo.
